Aventura en el Mont Blanc

Hola a tod@s.

Como ya comenté en el post anterior, esta aventura me gustaria comentarla mas ampliamente por lo que supuso ya que disfrute como nunca y ha sido una de las mejores experiencias de mi vida. Espero con suerte poder contarlo de la manera más breve posible pero sin dejar nada en el camino. Lo primero, una pequeña introducción en este escueto video:

Despues de unos días para arriba y para abajo consiguiendo todo el material, el lunes 30 de Julio a las 6 de la mañana nos montabamos en el coche camino a Chamonix. No llegamos hasta las 9 de la noche despues de parar varias veces ya que Sergio y Carlos no paraban de beber agua en virtud a los consejos para superar el mal de altura. Aunque el viaje fue largo de horas, no se nos hizo muy pesado ya que la furgoneta es amplia e ibamos entretenidos y lo más importante, Ilusionados. A la llegada, dormimos en una casa en la que teniamos una habitación para los cuatro, a dormir pronto, al día siguiente tocaba madrugón.

Al día siguiente, madrugón, preparar todo el equipo y para arriba. Cogemos un teleférico, el tren cremallera de bellevue, y empieza la caminata cargados a la espalda todos con nuestras grandes mochilas llenas de comida, ropa, liquidos, e ilusión y alegría, los principales mototres del viaje. Empezamos la subida, primero tierra, despues roca, más tarde piedras, y tras unas cuantas horas llegamos a la altura del refugio de Tete Rousse (3200 m) donde Germán se queda ya que se está encontrando mal con sintomas de mal de altura. Un golpe para todos ya que dejarlo allí fastidia, pero las previsiones metereológicas dicen que hay que seguir hasta el refugio de Gouter (3800 m). Hasta aqií, mis fuerzas habian sido impecables sintiendome como un tiro hasta ese momento. Salimos de la zona de Tete Rousse y empieza el baile ya que estaba el temido paso de la bolera, famoso por sus desprendimientos. Pasamos la bolera, y eso no es nada ya que empieza lo duro, un tramos con un gran desnivel que se me hace larguisimo, durisimo y en el que sufro una barbaridad (no me di la vuelta por no fastidiar a mi hermano y a Carlos). Con toda la dureza, llegamos al refugio de Gouter muertos. Aun así aquí no nos podemos despistar, en el refugio no hay sitio y nos tocará dormir en tienda de campaña, la montamos, sacamos nuestro compañero el infernillo, una cenita y a dormir, que al día siguiente tocaría intentar cima a partir de las 2 de la mañana. Nos echamos a dormir 3 en una tienda para dos, un poco pretos, y con Sergio con sintomas de mal de altura, con fiebre, y afirma que si se levanta bien, tira poara arriba, sino, para otra vez...

Comienzo de la subida, cada vez era más espectacular!!!



Desnivel entre Tete Rousse y Gouter, mi punto de flaqueza



Hotel a 3800 m. de altura, una pasada.

 Las 2 de la mañana del miercoles, suena el despertador y Carlos y o decimos "Sergio como estás"; "bien chicos, vamos para arriba". Toma!!!! se levanto bien y lo iban a intentar, biennnnn. Yo decidí quedarme en la tienda, me pareció o más sensato ya que en mi vida me había puesto unos crampones y toda mi familia, novia y amigos pensaban que quedaría abajo, me dijeron que la montaña no es para valientes, y bien que hice. Yo me quedo durmiendo y me despierto en torno a las 9, espero, espero, y sigo esperando y aunque no me pongo nervioso me inquiete un poco, finalmente pude hablar con ellos con lo que me quedé más tranquilo. Resulta que en la ascensión Carlos tuvo un pequeño bajón, y en el descenso Sergio tuvo algun rato de mal de altura, pero finalmente, llegan a la tienda sanos y salvos, cansados, pero sobretodo felices contando el subidón que habian vivido al hacer cima. Una pasada, una alegría para todos, y algo muy muy pero que muy dificil. Recogemos, y otra vez a salvar el desnivel entre Gouter y Tete Rousse, bajada larga y cansina en la que vamos encordados a la que se une el cansancio de todos, pero tras dos horas, llegamos a Tete Rousse, donde nos esperaba German en mejor estado y contento por el resto ya que habian cumplido su sueño. Una vez allí, hablamos, y ante el cansancio (Carlos llevaba varios días sin dormir nada, aunque eso si, iba como un autentico tiro, que fuerza!!!) decidimos quedarnos en esa zona. Montamos las tiendas, tiramos un poquito del amigo infernillo de nuevo, cena rápida y a dormir.

La pareja en la cima



Eso es lo que teniamos que bajar!!!

Parecia que acababa el día, pero no, y segun estabamos metidos en la tienda nos esperaba una de las mejores experiencias. Empiezan a oirse ruidos, un poco de granizo, algun rayo lejano, mucho aire, mas aire, más granizo, más tormenta y más cerca, hasta que de repente PUMMMM, cayo un rayo alli mismo del que nos llego hasta el calor!!!. Aun lado, un cortado de 300 m, que a 3200 m de altitud acojona con un aire que estando yo de lado me tocaba el brazo, que pasada, pasamos miedo, pero una vez acabado fue la leche, parecia que se iria todo volando pero no, que suerte, teniamos hasta el plan para bandonar la tienda German y yo (que estabamos en la tienda en el lugar más peligroso), mucho miedo, pero una vez pasado, que experiencia, que bonito, que fuerza la naturaleza allí con todas las montañas rodeandonos llenas de glaciares, nieve, piedras, desniveles,...

Buen sitio para semejante tormenton, nuestra tienda estaba al otro extremo de la foto

Nos levantamos a día siguiente despues de dormir ya si placidamente, hacemos mochilas de nuevo, y para abajo. Ahora mejor (al día siguiente no ya que estaban loscuadriceps petados), vamos bajando, hacemos un descanso, y finalmente llegamos en hora al tren cremallera, eso si, en esta bajada ocurre la anecdota más curiosa del viaje: Carlos llevaba varios días llamandonos a Sergio y a mi los "benegas", una pareja de montañeros argentinos referentes a nivel mundial(http://patagonianbrothers.com/2012/), total que en la bajada vemos a dos argentinos y dice Carlos, "Creo que esos son lo Benegas", mucha casualidad, entonces Sergio y yo decimos en alto "benegas", y nade contesta, "este Carlos está flipado, menuda casualidad encontrarnos aquí a unos argentinos de los que llevamos hablando todo el viaje y que estan siempre viajando por el mundo". Continuamos la bajada, y Carlos ve que los argentinos se parecen mucho y son "buenos" montañeros que bajan muy rápido, van bajando, con Carlos pegado a ellos hasta que les rebasa para disfrutarlo. Finalmente llegué yo en último lugar, y ellos eran, los hermanos Benegas, que pasada, era verdad, que ilusión, y sobretodo que gente más llana y agradable, que risa, parecia imposible. (siento que la foto este así, en el pc me sale bien)



 Y despues de esta anecdota llegamos a Chamonix. Aquí fuimos a un parque a escalar y pasar la tarde con alguna actividad que no fuera muy dura por la dureza de lo previo. Siento por repetirme, pero ¡Una pasada!, gente desde 4 años hasta 80 escalando, abuelos con los niños a pasar la tarde y ver escalar, jovenes en grupos alli disfrutando en un entotno privilegiado rodeados de montañas enormes y con un lago y un parque donde hacian todo tipo de actividades deportivas. Aquí, volvimos el día siguiente tambien por la tarde, despues de subir a las denominadas "agujas Rojas", una roca para escalar a 2500 metros desde donde se podía ver frontalmente el mont blanc teniendo als nubes por debajo. Carlos y German se quedarón allí pero los "Benegas" nos bajamos a Chamoniz a ver algun glaciar (aunque luego nos arrepentiriamos visto lo bonito de las paredes donde se quedaron).

Paseando con los primeros que hicieron cima por Chamonix

Impresionantes vistas desde las "Agujas Rojas"

Escalando al "reves"

 Ya llevabamos más de 5 días de viaje, y el Sábado, decidimos hacer algo de turismo "alpino". Pasamos el tunel del Mont Blanc y nos acercamos hasta Cervinia por el precioooooso valle de Aosta a disfrutar del Cervino, del que aprendí que es un pico mítico para los escaladores y de los más bonitos. Tuvimos un día muy agradable en el que nos divertimos y relajamos en los precioso valles para despues escalar en un rocodromo en la zona y comer allí acompañados de nuevo de nuestro querido infernillo y nuestra amada pasta. Otro día precioso, y a última hora a chamonix donde cenamos de despedida con Raúl Lora y Ruben Valenciano, muy buena gente que días antes habían hecho el Cervino, el Eiger y el Mont Blanc, dos maquinas.



Descansando en un bar.



Los hermanos en una casa muy bonita de la zona.

Y el viaje llega a su fin, vuelta a casa previa parada con bañito en Barcelona el Domingo viendo más tarde en una terraza los juegos Olimpicos a pie de playa (da gusto ver atletismo en todos los sitios en época de juegos). El lunes llegada a Almazan felices por volver pero tristes por acabarse ya nuestras "vacaciones"

Lo quiero remarcar pero creo que leyendo lo anterior se ve lo que he disfrutado en este viaje. Cosas que podían ser negativas como dormir en una tienda o vivir una tormenta tan fuerte se ha convertido en algo sensacional, inolvidable y muy duro que me hará crecer en los momentos dificiles y luchar ya que creo que pocas veces he sufrido tanto como en la subida hasta Gouter. Quería remarcar el mérito de todos pero sobretodo de Sergio y Carlos, la montala es muy dura, tuvieron suerte por el tiempo pero aun así hay que estar "arriba" y hacer cima, chapeau por ellos, se lo merecían.

Gracias a tod@s los que se lo lean porque quizás sea un poco "chapa" pero espero que lo disfruten leyendolo como yo recordadolo pero me apetecia compartir algo tan bonito.

Un saludo